Retomando a Aguamarga que me retoma, lo diré de una vez, eso de que la vida también puede ser una puta mierda, y, a veces, gracias a la vida las justas. No queríamos dejar de decirlo.
Yo sigo esperando. De momento sigue la puta mierda. Pero no pierdo la paciencia y espero que llegue mi turno como en la frutería mientras veo como van desapareciendo tantas cosas en torno a mi.
3 comentarios:
Ayer me enteré, una vez más, de por qué la vida es ahora una puta mierda. Tu mierda, mi mierda, nuestra mierda.
Tú sabes y Cock sabe que estoy con vosotros en esta mierda.
Besos
Realmente lo puse por otra circunstancia, pero ahora este post cobra todavía más sentido. Gracias, Solateras, por estar siempre pendiente.
Yo sigo esperando. De momento sigue la puta mierda. Pero no pierdo la paciencia y espero que llegue mi turno como en la frutería mientras veo como van desapareciendo tantas cosas en torno a mi.
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